sábado, 11 de septiembre de 2010

Mi Fashion Night Out


Jueves 9 de septiembre de 2010. Calle Ortega y Gasset. Fashion Night Out.

Eran las ocho y cinco. Y bueno no parecía que había tanta gente, no como yo me imaginaba. Pasamos por Aveda y dentro no había mucha gente, incluso los camareros estaban llegando en ese momento.

Pasamos de largo, y yo me pregunte si es que era demasiado pronto todavía y si las tiendas aun no estaría listas. Pero llegamos a la zona donde estaba la carpa Vogue, y ahí si que había mucha gente. Mi madre y yo nos quedamos unos minutos en la valla cotilleando un poco. Los periodistas de distintas cadenas alrededor del photocall esperando la llegada de algún famoso. En el rato que nosotras estuvimos paso por allí la presentadora Marta Robles, Antonio Carmona y el diseñador Juan Duyos.

Mire el reloj y eran las ocho y cuarto, la dije a mi madre que siguiésemos andando, que Chanel estaba cerca. Llegamos más o menos a la puerta cuando me di cuenta de que había cola para entrar. Me quede flipando con la pedazo cola que ya había para entrar a Chanel ya que no hacia mas que quince que se suponía que habían abierto las tiendas.

Como era una de mis preferidas para entrar esa noche, me chupe la media hora de cola que hicimos para entrar. Cuando llegamos a la puerta, mostramos la invitación de Vogue, pero el de la puerta ni lo miro. Me quede flipando un rato con el bolso 2.55, ya que me encanta, es precioso. Cogí una copa de champagne que me ofreció camarero y seguí cotilleando, las joyas que había en los expositores, los zapatos…aunque me decepciono un poco la ropa, había cuatro cosas nada mas, se suponía que iban a presentar la nueva colección, por eso me pensaba que iba a ver mas cosas en cuanto a ropa. Mientras estaba viendo los zapatos, Romina (reportera de Tonterías las Justas, de Cuatro) estaba grabando el reportaje que salio ayer en el programa (incluso sale mi madre un poco detrás de ella jeje). Luego cuando ya nos íbamos vimos que acababan de entrar Borja Thyssen y su mujer Blanca Cuesta, que son igualitos a como salen en la tele. Y ya a la salida una de las dependientas nos dio un detallito (un tipo collar, con cordón blanco y unos colgantes).

Cuando salimos había todavía más gente que cuando habíamos entrado, y la cola para entrar a Chanel era interminable.

Fuimos directas a Louis Vuitton pero como había cola, nos metimos primero a Jimmy Choo ya que se entraba sin problema (y de nuevo no nos pidieron la invitación). ¡Que maravilla de zapatos! Eran casi todos extraordinarios, a mi madre le encantaron todas las botas que había, y a mi las sandalias de taconazo y los bolsos. Daban un coctel y un camarero pasaba con una bandeja de jamón, bueno pues ni el cóctel ni el jamón lo probé ya que la gente en cuanto veía al camarero que había repuesto la bebida y la comida se abalanzaba sobre ella, pero bueno a mi lo que mas me interesaba era mirar todos los zapatos y bolsos uno a uno, y no estar pendiente de si el camarero ha rellenado la bandeja, en fin…

Salimos de la tienda y volvimos a Louis Vuitton, en la que la cola seguía. Nos quedamos unos cinco minutos, y al final nos fuimos, ya que no había mucha cola, pero es que en esos minutos no avanzo nada de nada…y todavía quedaban cosas por ver.

Pasamos por Bimba y Lola, a la que queríamos entrar pero también había bastante cola (ya que creo que daban un detallito, no estoy muy segura), pero no nos paramos.

Yo iba convencida hacia Carolina Herrera, que me había pintado las uñas de rojo, pero mi gozo en un pozo. Vogue había puesto que había una tienda de CH en el número 78 de Serrano, pero cuando llegamos estaba cerrada, y es que la habían trasladado a otra calle. Así que me quede con las ganas (el detallito que daban según he leído era una muestra de colonia). Pasamos por Gucci y también había cola para entrar, así que pasamos de largo. Cruzamos la calle y nos metimos en el Corte Ingles. Estaba llenísimo de gente, no se podía apenas andar entre un stand y otro. Nos quedamos en el stand de Dior que había una aglomeración de gente importante. Al principio no sabíamos que pasaba, luego nos dimos cuenta que daban algo. Le entregamos al chico que había allí nuestras invitaciones (¡¡¡por fin servían para algo!!!), y al rato nos dio junto a la invitación una miniatura del perfume de J’Adore (que me encanta porque el botecito es igual que el perfume grande, pero en pequeño). Seguimos a duras penas pasando entra lo stand, llegamos a ¿Gucci? Creo que era, no me acuerdo. Que daban coctel y fresas con chocolate, bueno cuando llegamos había cola y todo para coger una fresa, pasamos de largo, después volveríamos para ver si no había tanta gente ya que se me antojo una fresa con chocolate, que me gustan mucho. Fuimos a Kiehl’s y nos dieron unas muestras de una crema. Luego pasamos por Juicy Couture y una de las dependientas nos dio una muestra de su nuevo perfume. Volvimos al stand de Gucci, y volvía a ver cola para coger una fresa con chocolate, asíque pasamos de nuevo de largo. Salimos a la calle Serrano. Estaba hasta los topes de gente, no se podía apenas andar a gusto.

Vimos a Norma Duval que subía la calle, vimos el escaparate viviente de Cortefiel, que las modelos seguro que ya estarían hasta las narices de que les echasen tantas fotos y del calor que estarían pasando. Entramos a Zara y luego a Tous, que tenían platos con frutos secos distribuidos por toda la tienda y un camarero nos ofreció un chupito de licor de chocolate (que no me gusto mucho, porque estaba demasiado fuerte). Y me encanto la nueva colección de bolsos y carteras para este invierno. Yo iba pensando en mirar un anillo que me gusta mucho (creo que es el modelo Garra o algo así), pero en los expositores solo había joyas caras.

Mire el reloj y eran casi las diez y media, por lo que ya no podíamos entrar a ninguna tienda mas, ya que debíamos estar en Plaza Castilla antes de las once para coger el autobús.

En general, fue una noche fantástica. Me lo pase muy bien entrando en las tiendas, viendo las colecciones, el ambiente que había…

Sin embargo tengo algunos “peros”:

No se para que dan invitaciones, si luego salvo en el stand de Gucci en las demás tiendas que entre no me lo pidieron, Vamos que cualquiera que pasara por la calle iba a poder entrar a las tiendas igualmente. Creo que se debería haber pedido las invitaciones, que no cuesta nada que el que esta en la puerta la eche un vistazo.

Demasiada gente! Muchas colas para entrar en las tiendas, mucha gente dentro de muchas que apenas podías mirar las colecciones, no podías apenas andar por las calles…aunque creo que esto es inevitable.

Y el tema de la gente. Más del 70 % de los que fueron, iba a lo que iban. No a disfrutar entrando a tiendas que nunca has estado, o que en cualquier otra situación no entrarías. La gente iba a comer, a beber y a que les diesen un regalito por haber entrado. Como en la cola de Louis Vuitton, yo quería entrar (y si no hubiese sido por el tiempo y la cola, me hubiese encantado, ya que sus bolsos son…*.*) ya que quería ver toda la colección y el Speedy Damier Azur que algún día tengo pensado comprarme.

Pues unas chicas que llegaron detrás de nosotras, nos preguntaron que si daban algo, las dije que no, y con un ademán de desprecio dijeron que no las interesaba entonces, y que se iban a Chanel que si daban algo. Claro mi cara fue tal que esto o.O. Pero bueno, en fin…

Las que fuiste ¿Qué os pareció?

Un besito a todas!!


3 comentarios:

  1. Que envidia, me hubiera encantado poder ir a ver todas las colecciones!
    La gente en cuanto se entera que dan algo gratis allá que van sin importar lo que sea, jajajaja!

    Por cierto sí quieres pásate por mi blog que tienes un premio!

    Besos!!!

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  2. Yo no soy de Madrid y como me queda un poco lejos, no fui. Es una experiencia genial! Me encantaría vivirlo alguna vez aunque mi presupuesto no pueda cubrir muchos lujos, echar un vistazo al ambiente :D

    un besote

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  3. Yo iba a ir, tenía mi invitación y todo pero al final surgió el plan de ir a la playita todo el finde y no dudé mucho. La verdad es que leyendo los blogs en los que decís que había colas interminables y que no se podía casi ni respirar, me alegro de no haber ido...

    Un beso!
    www.des-petites-pensees.blogspot.com

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